- Ford celebra 30 años de producción en su planta de estampado y ensamble en Hermosillo, Sonora
- La planta, única en México en producir vehículos híbridos y la primera en ensamblar vehículos de lujo, embarca diariamente 1450 unidades a otros mercados
Hermosillo, Sonora, 22 de noviembre de 2016 – Han pasado 30 años desde que Ford llegó a la ciudad de Hermosillo, Sonora, para establecer uno de sus proyectos más ambiciosos en términos de producción: la planta de estampado y ensamble de Ford en Hermosillo. Tres décadas después, la automotriz celebra hoy los logros de esta planta en México, y el valor que representa en el plan de la compañía de transformar –una vez más- cómo se mueve el mundo.
Desde su instalación en 1986 la planta ha sido un símbolo de calidad e innovación. Fue la primera en el país en producir vehículos de lujo al introducir en 2012 la producción de Lincoln MKZ, y es la única en producir vehículos híbridos, lo que es una muestra de la confianza de la compañía por apostar en ingeniería y mano de obra de alta calidad como la mexicana.
“El reto siempre ha sido estar a la vanguardia en la producción de nuestros vehículos. El 30 aniversario de la planta de Ford en Hermosillo, es un claro ejemplo de que incluir innovación y tecnología, así como apostar por el talento mexicano, son clave para aumentar nuestra competitividad y entregar mejores autos, más relevantes para los clientes” dijo Gabriel López, presidente y CEO de Ford de México.
Esta es una de las plantas automotrices más modernas en el país, gracias a que su producción está respaldada por más de 500 robots de última tecnología. Además, ha sido reconocida por parte del MIT (Instituto Tecnológico de Massachusetts) como la mejor planta en aspectos de calidad.
Los tres turnos de producción que emplean a más de 3 mil sonorenses, permiten a la planta embarcar diariamente 1450 unidades de los modelos Fusion y el modelo de la línea de lujo, Lincoln MKZ, así como las versiones híbridas de ambos autos.
“Nuestro compromiso con el talento mexicano es contribuir en su desarrollo profesional; sobre todo, buscamos gente apasionada, la experiencia que obtienen en la compañía, los prepara para cualquier desafío de una empresa global”, mencionó José Islas, director de manufactura de Ford de México.
Para el estado de Sonora, donde la industria automotriz representa el 8% del PIB, la instalación de la planta, ha significado un impulso a la economía, gracias a la más reciente inversión de 1.3 mil mdd de dólares que Ford destinó a la expansión de ésta.
Cada año desde 2012 cuando Fusion y Lincoln MKZ comenzaron a producirse en la planta, se han exportado un promedio de 260 mil y 38 mil modelos respectivamente, abasteciendo las ventas en: Estados Unidos, Canadá, Latinoamérica, Corea, Medio Oriente, Así-Pacífico y África. La producción de estos modelos –sumado a la producción de Fiesta, en Cuautitlán- hace de México el cuarto productor de vehículos para la compañía.
Las ambiciones y trabajo de Ford, también han permeado en beneficio para proveedores. Desde 2004, la compañía integró un nuevo campus con 14 edificios dentro del perímetro de la planta, albergando a 17 proveedores. El proyecto permitió a la planta, tener acceso directo y flujo continuo en materiales.
Como resultado, México ocupa el segundo lugar en proveeduría para Ford fuera de Estados Unidos. Actualmente, la compañía destina 12 mil mdd en compras a proveedores dentro del país, lo que significa de un 11 a 12% del total de compras de Ford a nivel mundial.
Abastecer las demandas de la planta, han sido resultado de un trabajo de constante innovación en la línea de producción y logística. Integra un sistema de manufactura flexible, que es uno de los más avanzados en el ramo y bajo el cual, en una misma línea es posible ensamblar vehículos de dos diferentes divisiones.
Ford a nivel global tiene el objetivo de entregar vehículos y experiencias de manejo únicas y adaptables a las cambiantes necesidades de los consumidores. Para lograrlo, la planta emplea un herramental re-programable, que disminuye costos y tiempo al cambiar los aspectos de los vehículos.
En la planta de Ford en Hermosillo, no sólo los estándares de calidad han superado expectativas, también las iniciativas en beneficio al medio ambiente. Prueba de ello son las certificaciones ISO9001 e IS014000 en administración ambiental con las que cuenta.
La integración de un moderno sistema de aire acondicionado que no daña el medio ambiente, una planta de tratamiento de aguas residuales, modernos sistemas de pintura, así como el trabajo en conjunto con proveedores para entregar empaques reutilizables, hacen de la planta un referente en esfuerzos ambientales.
Ford en su planta de ensamblaje y estampado en Hermosillo, demuestra que el trabajo de excelencia en conjunto con una mano de obra altamente capacitada, así como una creciente apuesta por la ingeniería mexicana, son las herramientas a través de las cuales, la compañía entrega vehículos de alta calidad, competitivos a nivel mundial.